• ¿Quién es Ekain Araiz?

    Nací en Sopela, un 27 de julio de 1976 (42). He crecido en Sopela junto a mis padres y 2 hermanas.

    Me licencié en Geografía por la Universidad del País Vasco, y aunque en principio iba para maestro, me di cuenta que no era la profesión de mi vida, así que opté por una profesión que siempre me ha gustado, bombero. Tras años de opositor, acabé sacando la plaza. Actualmente trabajo de bombero en la Diputación Foral de Bizkaia. Estoy casado y tengo 2 hijos.

  • Cuéntanos, ¿cómo y porqué empezaste?

    Desde siempre he practicado algún deporte; fútbol, bodyboard, karate, buceo, atletismo,… A finales de los 90, un día que estaba ojeando una revista, me detuve a leer un artículo que hablaba de un deporte que consistía en realizar 3 disciplinas deportivas -nadar, bici y correr-, todo ello de forma ininterrumpida.

    Me pareció curioso, el hecho de tener que hacer 3 deportes en 1, y en formato non stop. Desde que leí aquel artículo, pensé que aquel deporte es lo que podía estar buscando.

    Cuando empecé a practicarlo, me enganchó desde el primer momento. No es nada monótono, ya que entrenas 3 disciplinas, por lo que no te da tiempo a poder cansarte de estar haciendo todos los días lo mismo. El entrenamiento de una disciplina suma para las otras dos, y a nivel de lesiones, el hecho de trabajar grupos musculares diferentes, hace que compenses muy bien entre los 3 deportes.

  • ¿A qué te dedicas cuando no estás practicando triatlón?

    Tengo la suerte de poder trabajar con unos horarios que me permiten disponer de algunos días libres a la semana, por lo que procuro entrenar por las mañanas, ya que por las tardes es cuando salen los niños de la escuela, y están en una edad en la que demandan mucho tiempo. Las tardes son para ellos.

  • ¿Practicas algún otro deporte?

    También me gusta salir con la bici de montaña y cuando tengo ocasión practicar el buceo deportivo.

  • ¿Cuáles son tus lugares/spots favoritos? ¿Sitio más lejano donde hayas hecho algún triatlón?

    El sitio más lejano donde he hecho un triatlón ha sido en Embrun, en los Alpes franceses. Aquí se celebra desde hace 36 años el mítico Embrunman, uno de los triatlones de larga distancia más duros que existen.

    Es uno de los triatlones que más me gusta. El entorno es espectacular, con la cordillera alpina como protagonista en el segmento ciclista, donde se sube Izoard, un puerto mítico del Tour de Francia.

    El entorno y su dureza hacen que esta prueba sea mágica, y cuando lo haces una vez, por muy duro que te haya podido resultar, sabes que tarde o temprano volverás.

  • Dentro del triatlón, ¿quiénes son tus referentes?

    La verdad que no tengo ningún referente en concreto en el triatlón. Son de admirar todos los deportistas que se dedican profesionalmente a esto. Es una dedicación plena la que tienen y su nivel de exigencia es máximo. Pero es más de admirar a cualquiera que tras trabajar 8 horas en una empresa, y tener familia, es capaz de sacar tiempo para poder entrenar. Sí que suelo fijarme en las personas cercanas a mí. Compañeros de entrenamientos, compañeros de club,… de todos ellos se puede aprender algo.

  • ¿Objetivos para este año?

    Para este año quiero preparar varios triatlones, entre ellos un Ironman que se celebrara en Francia, el Frenchman. Será en la localidad de Hourtin el 1 de junio de 2019. En esta carrera quisiera poder bajar la marca personal en esta distancia.

  • ¿Qué le recomiendas a alguien que empieza?

    Una de las cosas buenas que tiene el triatlón es que se puede practicar a cualquier edad. Existen carreras cortas, medias y largas. Para empezar en el triatlón, se pueden hacer carreras cortas, para las cuales no es necesario entrenar demasiado. A medida que te vaya enganchando este deporte, se puede ir valorando hacer alguna carrera de mayor distancia.

    En la larga distancia, al requerirse mucho tiempo para entrenar, se debe disfrutar del día a día, de los entrenamientos diarios, de la compañía en los mismos,… hay que saber disfrutar del camino.

  • ¿Algo que añadir?

    Aunque es algo que cada día que pasa se hace más difícil poder conseguirlo, tengo en mente poder realizar algún Ironman clasificatorio para el Campeonato del mundo de triatlón, que se celebra todos los años en Kona (Hawai). Para un apasionado de este deporte, el poder llegar a hacer algún día esta prueba es algo que tarde o temprano se te pasa por la cabeza.

    Aunque hay que recalcar que es dificilísimo, algún día habrá que intentarlo. Solo intentarlo merecerá la pena.